La Feria del Libro de Valladolid ha reunido a la catedrática de Prehistoria y divulgadora, Marga Sánchez Romero y la escritora y periodista Laura Ferrero moderadas por la profesora de Antropología María Luisa Municio en una mesa redonda sobre igualdad bajo el título ‘La costumbre de la omisión de la mujer en la historia’.

Sánchez Romero ha abordado este silenciamiento del papel de la mujer con su libro Prehistoria de las mujeres, un ensayo divulgativo en el que trata de desmontar las ideas preconcebidas sobre los estereotipos de las relaciones entre hombres y mujeres en la prehistoria. “Este discurso del hombre cazador y la mujer que cuida la familia se origina en el siglo XIX sin ninguna base científica y lo venimos arrastrando desde entonces”, ha relatado.

La catedrática de Prehistoria ha defendido la ciencia como el mayor arma que tiene hoy día la mujer para reivindicar su papel en la historia. “Hablar de hombres es la norma, pero para hablar de la mujer ha que demostrarlo, con ADN o con huellas dactilares. Pero bueno, como está la ciencia ahí lo podemos estudiar”, ha argumentado.

Sánchez Romero ha puesto sobre la mesa datos para refutar algunos de los estereotipos más comunes, por ejemplo el del hombre cazador. “Las excavaciones arqueológicas demuestran que entre un 20 y un 30 por ciento de las sepulturas con armas son de mujeres y por lo tanto su papel como cazadoras no es anecdótico”, ha apuntado. Y también se ha referido al papel creativo de la mujer. “Gracias a una huella dactilar se ha situado a la mujer en el relato del arte rupestre”, ha expuesto.

Por su parte, Laura Ferrero ha reivindicado la ruptura de estereotipos también en la literatura. “Si un hombre escribía sobre su familia o sobre su madre, por ser hombres se consideraba literatura universal, pero si lo hacía una mujer era literatura femenina”, ha planteado. “Sí que tengo la sensación de que el feminismo nos ha dado espacio para que nuestras ficciones estén en el mismo lugar”, ha añadido.

Ferrero acaba de publicar Los astronautas, con la historia de su familia de fondo. “Hace cinco años vi por primera vez una fotografía en la que aparecía con mi padre y con mi madre. Ellos se divorciaron en los años 80, luego formaron sus respectivas familias y yo me pasé la vida pivotando entre una y otra, ninguna la mía, pero había desparecido cualquier evidencia gráfica”, ha relatado. A partir de ese momento trató de investigar qué ocurrió pero las versiones fueron tan contradictorias que le hicieron desistir.

Tengo que encontrar la manera de contar esta historia sin contar lo que mis padres no quieren que se cuente y utiliza la historia de los primeros astronautas con todo lo que les fue ocurriendo a su regreso a la tierra para contar el extrañamiento de una pareja. “Esa metáfora me dio un relato de mi vida. Fue como el álbum de fotos que nunca tuve”, ha apuntado.