Feria del Libro de Valladolid > Noticia Principal > Jesús Anta en el recuerdo: “El hombre que se ocupaba de lo pequeño y de los pequeños”
La Feria del Libro de Valladolid ha rendido este martes un emotivo homenaje a Jesús Anta, investigador, divulgador, político y cronista de lo cotidiano, cuya labor en defensa del patrimonio popular de Valladolid y de su provincia ha dejado una huella indeleble en la vida cultural de la ciudad. El acto, celebrado en el Salón Principal del Círculo de Recreo, ha reunido a amigos, colaboradores y editores para recordar su figura y legado.
El homenaje contó con la participación del editor y folclorista Joaquín Díaz, el editor de Páramo Javier Campelo, y la portavoz de Valladolid Toma la Palabra, Rocío Anguita. Cada uno de ellos aportó un testimonio personal y profesional que ayudó a perfilar una imagen poliédrica y profundamente humana de Anta: el investigador minucioso, el divulgador generoso, el militante comprometido y el amigo leal.
Joaquín Díaz lo definió como un hombre guiado por la curiosidad y la minuciosidad, dos cualidades que marcaron toda su obra. Recordó la pasión con la que trabajó en su último libro, Fuentes, pozos y lavaderos de la provincia de Valladolid, publicado por la Fundación Joaquín Díaz. “Todo lo que publicaba estaba rigurosamente documentado, siempre con una voluntad de devolver a la sociedad lo que la sociedad le daba”, apuntó.
Desde una mirada más política y personal, Rocío Anguita subrayó el compromiso ético y vital de Jesús Anta con la justicia social y la cultura democrática. “Jesús era memoria viva de nuestra organización y de la ciudad. Su labor era también un proyecto pedagógico: rescatar el saber popular para construir comunidad”, afirmó emocionada.
Por su parte, Javier Campelo, de la Editorial Páramo repasó la fecunda colaboración editorial con Jesús Anta en títulos como El patrimonio del concejo o Historias y personajes no tan conocidos del Valladolid contemporáneo, recordando que “la suya fue una mirada capaz de leer la calle y los barrios para entender lo que fuimos y lo que somos”.
Al cierre, el público intervino con testimonios espontáneos que dieron aún más cuerpo a la figura del homenajeado. Desde vecinos de su barrio hasta fotoperiodistas, excompañeros de concejalía o antiguos colaboradores, todos coincidieron en resaltar su humildad, su empatía y su pasión por Valladolid. “Era el hombre que se ocupaba de lo pequeño y de los pequeños”, resumió una de las voces del público, emocionada.
Pedro Ojeda cerró el acto con un compromiso: trabajar para que los artículos de Jesús Anta, publicados en prensa y en su popular blog Valladolid, la mirada curiosa, puedan editarse en un volumen recopilatorio. “Es una deuda con su memoria y con la ciudad”, concluyó.
Entre los libros y las palabras, entre los recuerdos compartidos y los abrazos sinceros, Jesús Anta volvió a estar presente. Porque, como se repitió varias veces durante el acto, la mejor forma de homenajearle es seguir leyéndolo, escuchándolo y recorriendo Valladolid con su mirada.
Si continuas utilizando este sitio, aceptas el uso de las cookies. Más información
Las opciones de cookie en este sitio web están configuradas para "permitir cookies" para ofrecerte una mejor experiéncia de navegación. Si sigues utilizando este sitio web sin cambiar tus opciones o haces clic en "Aceptar" estarás consintiendo las cookies de este sitio.